Prolonga la vida de tu traje
Estudios han comprobado que no hay nada como un buen traje, y mejor, uno hecho a la medida, para verse elegante, sofisticado, atractivo y por supuesto bien vestido.
Pero ¡ojo!, si no cuidamos bien esta prenda, el gusto de verse bien puede durarnos muy poco.
Los trajes necesitan tratarse con mucho cuidado, no sólo para asegurarnos que tengan una larga vida, sino para que siempre conserven su línea y continuemos viéndonos impecablemente bien vestidos.
Sigue los consejos que a continuación te doy y podrás mantener tu traje en buenas condiciones por mucho tiempo.
1. ELIGE LA TALLA CORRECTA
Si el traje que elegiste se ajusta demasiado a tu cuerpo, las fibras de la tela sufrirán una tensión innecesaria y con el tiempo ésto puede causar que la tela se adelgace o desgarre. La talla correcta siempre será aquella que realce tu figura y te permita libre movimiento.
2. ROTA TUS TRAJES
Un traje debe descansar al menos 24 horas antes de volver a usarlo, pues necesita ventilarse para evitar que lo dañen la humedad y los olores que haya absorbido durante el día. Si vistes diario de traje ten por lo menos 3 de ellos en tu guardarropa. Si sales de viaje y tienes que ir “trajeado” algunos días, lleva por lo menos dos juegos. Nunca uses el mismo traje al día siguiente.
3. USA DISTINTOS PANTALONES CON EL MISMO SACO
Por obvias razones, los pantalones se desgastan más que los sacos. Si vienes a Havoc, te recomiendo pedir que te hagan otro juego. Así podrás intercambiarlos y prolongar la vida del conjunto.
4. NO ABUSES DE LOS BOLSILLOS
Éstos no están hechos para guardar objetos voluminosos ni pesados. Si les metes muchas cosas, irán perdiendo su forma, haciéndose bolsudos y desfigurando la línea tanto del saco como del pantalón. Al terminar de usar la vestimenta se deben vaciar los bolsillos. Nunca dejes objetos dentro. Lo que me lleva al siguiente punto.
5. ANTES DE GUARDARLO...
La lana pura no guarda olores indeseados gracias a uno de sus componentes que es la creatinina. Sin embargo, siempre es bueno, para cualquier traje, que se aireé por unas horas antes de guardarlo. También es importante que le pases un cepillo de cerdas suaves con recorridos cortos y rápidos para quitarle los cabellos y pelusas que se le hayan adherido.
6. A LA HORA DE COLGARLO
Para los sacos son recomendables las perchas (ganchos) anchas, con bordes redondos para mantener la forma de los hombros. Las mejores son las de cedro (esta madera aleja a las polillas). Nunca vayas a guardar tus sacos con las solapas levantadas, mantenlas siempre en su posición natural. Y jamás lo guardes abotonado porque perderá su caída natural. Para colgar los pantalones alinea perfectamente las costuras, una contra otra y móntalos en un gancho doblados por la mitad, o mejor, que cuelguen a lo largo completamente. Así evitarás que se marquen líneas innecesarias. Y, nunca, nunca dejes tirado tu traje tirado sobre una silla, la cama o ¡¡¡el suelo!!!
7. CUANDO LLEGA AL CLOSET
Siempre guárdalo en una funda. Las mejores son las bolsas de tela ya que permiten que el traje respire y lo protegen del polvo y los insectos. Procura evitar las bolsas de plástico pues no dejan respirar a los tejidos y con el tiempo podrían debilitar las fibras de la lana y dañar el traje. Y al meterlo al closet asegúrate que no quede apretado por las prendas que ahí guardas.
8. SU LIMPIEZA EN TINTORERIA
Los trajes aguantan perfectamente 4 puestas antes de enviarlos a la tintorería. De hecho, si no es estrictamente necesario, es mejor sólo llevarlo 2 veces al año. Con eso será suficiente para mantenerlo en perfecto estado. El paso por la tintorería acorta la vida de las prendas. Los químicos que ahí usan son abrasivos y con el tiempo, invariablemente, dañan las fibras de la lana, desgastándolas hasta que se rompen. Además, en estos negocios, al planchar los sacos, van haciendo que se pierda el volumen de las entretelas y por consiguiente, el cuerpo del traje. Si tu conjunto sufre un accidente, como una mancha, entonces sí, llévalo a la tintorería lo antes posible. Si lo guardas sucio la mancha podría quedar incrustada permanentemente. Y si tratas de eliminar la mancha frotándola, puede quedar marcada. Siempre lleva juntas todas las piezas del traje, aunque sepas que alguna no necesita la limpieza. Así los colores se mantendrán igualados. En la tintorería es importante que comprendan qué tejido están manejando. Házlo notar.
9. SU LIMPIEZA EN CASA
Lo mejor es la plancha de vapor o, en su defecto, el vapor de la regadera. Una pasada con cierta regularidad, abrirá y revivirá las fibras del traje, ayudando a limpiarlo y de paso a quitarle pequeñas arrugas. Si necesita un retoque mayor, plánchalo suavemente, y siempre protegiéndolo con un paño de algodón para evitar que la tela se abrillante. Y por favor, nunca, nucna laves tu traje en la lavadora ni lo pongas en la secadora.
Atte Havoc.